Khentrul Rinpoche y Judith Simmer-Brown se sientan a charlar junto a la chimenea sobre el aspecto femenino del budismo. El budismo tibetano ha estado dominado durante siglos por figuras masculinas de gurús en una sociedad patriarcal. Esto llevó a las mujeres del Tíbet a rezar para renacer como hombres y muchas mujeres en la sociedad occidental se preguntan si solo hay budas masculinos. Esto está lejos de la naturaleza de lo que realmente se enseña en el Dharma. En el Tantra de Kalachakra tenemos la unión definitiva de los aspectos femenino y masculino, ambos necesarios para alcanzar la iluminación.